Mamá no pudo evitar volver a ver las fotografías de la Semana Santa del año pasado y se ha dado cuenta de que el bebé que había tenido ha crecido y se ha convertido en un niño que a pesar de los 21 meses que tengo ya no tengo esa carita de bebé. Esta Semana Santa y en concreto el Domingo de Ramos ha sido diferente en muchos aspectos no solamente porque he crecido y no lo celebramos donde vivo sino porque mi abuelito Manolo ya no está con nosotros, nos dejó hace 7 meses pero yo siempre lo llevo en mi corazón.
Ahora que miro la fotografía pienso que aguanté muy bien mi palmón en la mano y no lo solté en ningún momento aunque no sabía ni que era ni para que servía. El año pasado ni andaba solo, iba siempre en el viejo carrito o sino al brazo, este año fui desde casa de la abuelita Montse hasta la iglesia andando hasta que me cansaba y me cogían en brazos o a hombros de mi papá. Por cierto tampoco tenía tanto pelo y los ricitos que tengo ahora ni existían. También decir que mami ha cambiado mucho y perdió todos los kilos que había ganado con mi embarazo, pasada la lactancia materna y dejar pasar un año empezó a recuperarse, pero como no se va a recuperar si no para todo el día detrás mio.
en marzo de 2008 tenía 10 meses, 8 corregidos
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