Un día de playa

Hace días que no cuento nada, la última vez expliqué que tenía el fin de curso en la guardería y que nos iban a entregar la orla. Nos lo pasamos muy bien, vino un grupo de animación pero yo no le hice mucho caso preferí corretear entre los juguetes de la guardería, esa tarde no me porté muy bien que digamos pero al final recibí mi orla y un regalito.

La semana pasada estuve en la playa con mis abuelitos y mi tía. Fuimos a pasar un día con ellos y aprovechamos que hacía sol y calor para ir a la playa. Me lo pasé genial, al principio no quería mojarme los pies porque el agua estaba fría y me daba un poco de repelús las olas pero al final mami me enseñó un juego, chapotear con los pies cuando las olas se acercaban a la orilla y me encantó a partir de ese momento ya no había quien me sacara del agua.
En San Juan este año no hemos hecho nada especial porque papá estaba de guardia y ha tenido que trabajar así que en la verbena nos comimos la coca y salimos a tirar petardos pero de esos que son para los niños pequeños y yo les llamo bombetas.
Tuvimos puente así que hasta hoy lunes no he vuelto a la guardería tantos días en casa y en el parque me ha dado pereza volver, cuando mami me ha dejado no me quería quedar.
Dentro de poco empezaremos la temporada de piscina, ya está abierta.