El viernes me encontraba mejor y pude ir a la guardería para salir junto con mis compañeros de clase a la rúa.El día transcurrió un tanto accidentado, de camino a la guardería casi al llegar y antes de cruzar la calle me caí al suelo con la mala suerte que me hice un buen corte en el labio con los dientes.
Iba caminando tranquilo con las manos en los bolsillos de mi chaqueta y muy contento, mami había dejado el carro en casa pero sin esperármelo me di tremendo trompazo. Como me sangraba tanto el labio, mami se asustó mucho porque apenas podía contenerme la sangre. Cruzó corriendo la calle porque estaba la mami de uno de mis compañeros para decirle que le dijera a mi seño que nos íbamos al Ambulatorio.
Menos mal que aparte del susto y de la cantidad de sangre que me salió era un corte que solo se iría cerrando así que volvimos hacia la guardería y mami me dejó en clase para que me vistieran de Diablo.Sí, todos nos disfrazamos de diablos y nuestra clase estaba totalmente rodeada de padres haciendo fotos, ni los famosos tienen tantos paparazzis, era un ir y venir de padres y muchos de nosotros al verlos nos poníamos a lloriquear.
Yo fui uno de ellos al ver a mami y es que estaba un poco dolido y tristón después de haberme caído.
Mami a ratos me daba la mano y me acariciaba la cara para que no llorase.
Acabada la rúa entramos en clase y merendamos coca con chocolate y zumo, los padres podía estar allí con nosotros. Nos pusieron el Cantajuego y bailamos, así que me lo pasé muy bien a pesar de mi caída.
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